LGTBQ+

PSICOLOGÍA AFIRMATIVA DE LA DIVERSIDAD SEXUAL Y DE GÉNERO

A lo largo de la historia, las principales organizaciones de la psicología y la psiquiatría han
patologizado al colectivo LGTBQ+ por no encajar en los patrones hetercisnormativos.
Personal y profesionalmente, me posiciono en contra de esta patologización y de cualquier
tipo de terapia “de conversión”. Todas las personas tenemos derecho a expresar y disfrutar de
la libertad de ser quienes somos y amar a quien queramos.


Desgraciadamente, el estigma, además de darse a nivel sistémico, puede aparecer en el
entorno más cercano de la persona LGBTQ+, en el ámbito familiar, social, académico o laboral,
entre otros. Esta discriminación puede ser manifiesta a través de agresiones verbales o físicas,
pero también puede ser muy sutil. Incluso hay veces que la discriminación se da dentro del
mismo colectivo.


Es posible que sientas rechazo por parte de las personas de tu entorno, o quizá tengas miedo
de mostrarte tal cual eres. En ocasiones, la internalización de los valores sociales negativos
conduce a la homofobia interiorizada, lo cual produce conflictos internos y una baja
autoestima.


¿Quiere esto decir que una persona debe acudir a terapia por ser LGTBQ+? Desde luego que
no. Los problemas que presentan las personas LGBTBQ+ pueden ser las mismas que las de
cualquier persona debido a estresores que generan múltiples situaciones y experiencias
vitales.


Lo que quiere decir es que es importante que la psicoterapeuta tenga conocimiento
especializado en cuanto a las dificultades particulares que se encuentra una persona lesbiana,
gay, trans, bisexual, queer, no binaria y en definitiva, todas las variantes de la diversidad sexual
y de género, en comparación con una persona cisgénero y heterosexual.

Una terapia afirmativa no es tanto una terapia en sí, si no una perspectiva culturalmente
relevante y receptiva para las personas LGTBQ+ que:


– Aborda la influencia de las desigualdades sociales
– Fomenta la autonomía
– Mejora la resiliencia, el afrontamiento y la construcción de la comunidad
– Aboga por reducir las barreras sistémicas al desarrollo mental, físico, relacional y
sexual
– Potencia las fortalezas de las personas

En ocasiones, los problemas de una persona LGTBQ+ están ligados a la identidad sexual, pero
esto ocurre principalmente debido a la persistente estigmatización y discriminación a la que es
expuesta. Algunas de estas situaciones particulares son:


– Estar viviendo una situación de discriminación o rechazo en algún ámbito de tu vida
– Tener preocupaciones sobre “salir del armario” – “coming out”
– Sentir miedo o vergüenza por ser descubierto – “outing”
– Que sea un tema tabú en tu familia o en tus círculos sociales
– Sentir confusión y malestar acerca de tu identidad sexual o de género
– Falta de referencias o un grupo social que transmita aceptación
– Ser familiar de una persona LGTBQ+ y tener inquietudes al respecto